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Estoy convencida de que todos hemos escuchado que beber agua es muy importante y beneficioso para nuestra salud. Pero, ¿sabemos por qué?
El agua es un nutriente indispensable, hasta el punto de que podemos sobrevivir sin ingerir alimentos sólidos durante unas semanas, pero sin beber agua aguantaríamos tan sólo unos días. Es necesaria no sólo para los humanos, sino para todas las formas conocidas de vida.
Un 22% de la composición de nuestros huesos es agua, un 75% de la composición de nuestro cerebro y hasta un 90% de la composición de la sangre. Se dice que las tres cuartas partes de nuestro peso corporal es agua. Su importancia radica en que forma parte activa en muchos de los procesos que realiza nuestro organismo.
La cantidad de agua que el organismo elimina mediante la transpiración, la respiración, la orina o la materia fecal oscila entre los dos litros y los dos litros y medio por día. Por eso es imprescindible beber agua, para reemplazar la pérdida en esos procesos. Una deshidratación leve puede ser la causa de tu cansancio o fatiga.
Beber agua en su justa medida
Dos litros de agua es lo que recomiendan que bebamos al día para mantener una hidratación adecuada, si bien parece no existir ningún fundamento científico que avale esta afirmación.
Mi experiencia personal es que cuando bebo un par de litros de agua repartida a lo largo del día, me siento mejor, más ligera y “limpia” por dentro. De hecho, procuro hacerlo a diario, aunque no tenga mucha sed. He comprobado que me sienta bien físicamente y eso también ayuda a mi bienestar anímico.
Beber agua no es la única manera por la que el organismo recupera el líquido perdido. Muchos alimentos -en especial frutas y verduras- contienen agua, así como zumos, infusiones, sopas e incluso, la leche.
El deporte, el ejercicio físico, es una fuente de deshidratación importante (está claro que se suda más), pero incluso estando en reposo los órganos siguen consumiendo líquidos de los tejidos y entonces sentimos sed. La sed es la señal de que el organismo necesita hidratación, beber agua.
Beber agua para…
El agua es esencial para la hidratación de la piel. Todo tipo de pieles, no sólo las secas, necesitan agua para la salud del cutis. La hidratación de la piel no sólo debe hacerse por fuera (me refiero a la aplicación de cremas), sino también por dentro; es necesario beber agua para su cuidado. Además, cuanto más hidratada esté la piel, más tarde aparecerán las arrugas.
Para terminar, algunas de las funciones que desempeña son:
- regula su temperatura mediante la transpiración,
- transporta los nutrientes y el oxígeno a las células,
- absorbe los nutrientes,
- elimina toxinas y desechos,
- mantiene el rendimiento físico,
- lubrica las articulaciones…
Tomar un gran vaso de agua al despertar ayuda a activar los órganos vitales. Yo lo tomo a diario en ayunas y con aloe bebible. Así empiezo cada día mis rutinas.
Y tú, ¿cuánta agua bebes al día?
Imagen Vaso de agua de Shutterstock